Desde el día 12 de marzo, tenemos en las tiendas el disco de Sr. Chinarro "Menos Samba". Y la cosa es muy sencilla: si quieres entender el mundo en el que vives, desde un punto de vista poéticamente potente, y maduramente correcto, no podrás evitar adorar a Antonio Luque y a su música. Una música que no dejará de llegarte a los oídos, puesto que Sr. Chinarro tiene preparado un nuevo trabajo para este mismo verano, cuando este apenas habrá llegado a la mitad de los rincones del país.
Quiero evitar discos anteriores de Sr. Chinarro y analizar su carrera para saber por que hemos llegado a "Menos Samba", pues me temo que llegaría a la conclusión de que realmente necesita resarcirse con este disco. Y como decía antes, creo que en las letras y en su sentido acierta y mejora la senda perturbada de la que viene. Pero musicalmente aún sigo sin encontrar el ritmo, el motivo o la extravagancia que gira "Menos Samba".
¿Mezclar el pop actual con sevillanas? Por que no. Así empieza. ¿Mezclar la canción protesta con el techno? Por que no. Precisamente, así finaliza el disco. El problema es que de la canción 1 a la canción 19, hay que escuchar poco más de una hora de música, en la que en cada tema parece rebuscar un estilo nuevo, convirtiendo el LP en un batiburrillo que se hace cuesta arriba. Y no me gusta doparme para escuchar un disco.
Sr. Chinarro forma parte de nuestro pop. Y ocupa una butaca importante en él. Y casi siempre con una queja social potente y creíble. En este disco podemos excluir la historia contada en "Brasilia" (donde siempre quedan restos sociales casuales), o "Medio Pollo". Dos canciones que no pretenden mostrar una forma de pensar y de mejorar. Al otro lado de la balanza, "La arenga de los Sindicatos Futuristas" o "Dinero (otra vez no)", por ejemplo, las cuales pueden definir el camino de Antonio Luque: protesta y mezcla de estilos.
Siento que me encuentro ante un disco de momentos. Una de cal y otra de arena. Altibajos. Lo podemos llamar como queramos. Pero nos falta un sentido global. Aunque nos podemos agarrar a dos cuestiones que desde aquí no vamos a poner nunca en duda. Primero, el nivel compositivo de Antonio Luque siempre puede salvar un disco firmado por él. Y segundo, desde hace años todos sabemos que lo mejor del Sr. Chinarro está por llegar.
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