Me resulta difícil de explicar. Así que empiezo por el final: "Demasiado Soñadores" de Second me está costando más de lo previsto a pesar de ser uno de los mejores conciertos que he visto este año. En cambio, si que ha habido reconocimiento al grupo, puesto que han sido galardonados por los Premios de la Música y la Creación Independiente, Pop-Eye 2011, como Artista Nacional y Mejor Videoclip por "Muerdeme".
Creo que hay un problema de voluntades e idiomas, algo que en nuestro país se enfrentan muy a menudo. La voluntad de Second es bueno. Eso lo tengo claro. Su sonido tiende a la facción mas fofa de Depeche Mode. Pero nuestro idioma es tan desagradecido, que por el camino de los altavoces a mis oídos, sus canciones se van desmembrando poco a poco.
Y como ya he dicho, he cantado a voz en grito "Muerdeme", "Autodestructivos" o "Demasiado Soñadores" a su lado. Y me han hecho sentir genial, han sonado tremendos y me he sentido parte del proyecto. Pero pongo el disco, gira... y no. No es lo mismo. Y ya me lo temí desde el adelanto: "NADA".
No creo que nadie del grupo lea esto, pero necesito expresar mi lamento. Lamento haber sido uno de los defensores de Second, exponiendome a ser tildado de muchas cosas que seguramente soy, y ahora ser crítico con ellos. Creo en vosotros, creo en el giro hacia la oscuridad que habéis dado, creo en que vuestra voluntad es maravillosa y creo que "Demasiado Soñadores" puede servir de plataforma de lanzamiento para algo mucho más grande.
Es difícil llegar a ser demasiado soñador. Os lo digo yo que vivo en una nube. Necesito más. Se que podéis dar más. Creo en que me vais a dar más, en que nos vais a dar más.
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