"Disco Grande" es un programa de Radio 3, que después de comer muestra la vida y obras de un grupo, nacional o extranjero, que se acerca por sus estudios a tocar en acústico y promocionar su obra.
El lunes 08 de noviembre, me trajeron a la memoria el disco "Una forma de hablar" de María Rodés, una catalana que forma parte de esas princesas musicales, que con su estilo personal, te trasladan a distintos ecosistemas, tranquilos, dulces.
La forma tan personal de cantar de María, contrasta con su forma de ser, vergonzosa y silenciosa. Es de ese tipo de artistas que se expresas infinitamente mejor con una guitarra en las manos y un micrófono delante... pero para cantar.
Reconoce diferentes influencias, como Fiona Apple, Radiohead, Bob Dylan ó Standstill. Su disco contiene 11 canciones de diferentes cortes y niveles, que nos han llegado con mucha facilidad, y hasta muy dentro.
Si es por destacar, prioritariamente hablamos de "Una forma de hablar", corte 3 del disco, y para nosotros tema, que aunque no es identificativo del resto del disco, es el más single de todos, y animado. Pero la forma de empezar el disco con "Desorden" primero, y "A lo mejor" después, no está nada mal.
El toque personal de todas sus canciones llega al summum con la canción 10, "Desastra", y con "La nana del Agua", corte 8, nos entregamos absolutamente a María, para que haga de su guitarra lo que desee. Para que haga de nuestros oidos lo que guste. Y lo que desea es "Lo que hay que oir", otra joya escondida de "Una forma de hablar"
Creo que el amor es libre, y uno está enamorado de quien le dá la gana. Otra cosa es si es correspondido. Además, el amor viene y se va, no? No lo se. Yo ahora estoy enamorado de María Rodés, y os lo cuento por que creo que mucha más gente se podría enamorar de ella.
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